
Tantos años viéndola encendida que no puedo pensar en el momento que esta se llegue a apagar. Dicen que si una lámpara se destroza, la luz yace muerta en el suelo. Tantos años viéndola encendida, que si esta se apaga, una enorme melancolía velará su muerte de rodillas en el suelo.
Tantas horas leyendo bajo esa
lámpara, que el día que no la vea encendida entonces sabré cuanto de
importante era tenerla encendida